Editorial: Glenat | 67 páginas color | Tomo 5 de 5 | Autores: Chaillet, Boisserie, Convard, Annabel

Gilles Chaillet (Los escudos de Marte) nos legó esta obra póstuma en la que, basándose en las leyendas y la literatura romana clásica, partiendo de La Eneida de Virgilio, traza un fresco histórico sobre la Ciudad Eterna.

306 d.C. Constantino I reinaba sin oposición sobre un imperio que se extendía desde el Mar del Norte hasta Oriente. Su madre, Helena, ferviente cristiana, le instó a convertirse e imponer la religión del Dios único a todos sus ciudadanos. Las familias Leo y Aquila siguen siendo los guardianes y garantes de la estabilidad del Paladio, pero ahora tienen que rendir culto clandestinamente. El Emperador acaba de fundar una segunda capital para el Imperio Romano de Oriente: Constantinopla. Bajo la presión de su madre, impuso la religión cristiana. Para ello, creó un espantapájaros que animaría a los romanos a abrazar su fe: ¡inventó al Diablo! Encontró un chivo expiatorio ideal en el antiguo culto del Paladio, y urdió un plan para exponer esta antigua creencia y a sus adoradores a la venganza popular. Pero Ker, la deidad aprisionada en la estatua, utilizará todos sus poderes malignos para frustrar los planes del Emperador…